Bueno hablemos sobre Senegal, ¿no? Visitamos Dakar (Ille de Goree y lago Rosa) y empezamos nuestro viaje hacia el Senegal más profundo: País Bassari. Compartimos el viaje con Beth, Sergi, Demba y Paco. Increíble los pueblos que visitamos y la gente con la que nos relacionamos.
Demba se acuerda de todo el mundo, de aquel pueblo que está allí alejado, de aquel campamento que necesita un empujón, de aquel dispensario sin recursos, de aquella escuela que hace lo que puede, de aquel niño que necesita seguir estudiando español, de aquel chaval que un día puede convertirse en guía, de aquel hermano, de aquel familiar,… y eso se nota cuando nos lleva a visitarles. Se nota el cariño y el respeto con el que le miran y con el que le escucha. Y lo mejor del viaje ha sido que nos dejara compartir con él todo esto, que nos explicara las intimidades de un pueblo, que nos dejara acercarnos a su cultura y entrometernos en sus vidas.
No se me olvidaran nuestras charlas en el campamento Badian, en Mako, o las reuniones con el jefe del pueblo sobre la construcción de la granja, el recibimiento con los brazos abiertos de la familia de Paco, las sonrisas de aquellos niños que recibían un par de zapatos, la mirada de aquel chaval que nos guiaba hacia Iwol, su sonrisas… y una vez en España no se me olvidará la mirada de aquel joven senegalés que vendía cds en la playa y que soñaba con volver a su país.
Ha sido un viaje muy bonito. Gracias por todo.